El último cátaro Guillaume de Belibaste, asesinado en la hoguera por el Vaticano, profetiza en 1321 que en 2021 resurgirá un Nuevo Paradigma, se llama la Profecía del laurel.
Recordemos que el último Gran Maestre templario Jaques de Molay también soltó una profecía antes de morir y se cumplió, el 13 de Octubre de 1307 antes de morir, de Molay dijo: «No tardará en venir una inmensa calamidad para aquellos que nos han condenado sin respetar la auténtica justicia». Un año después fallecieron el Monarca galo y el Papa los cuales fueron los que condenaron a de Molay.
Sauron, el Señor Oscuro, el Sol Negro, la sombra de Saturno, ese gran Ego Colectivo que está devorando a la humanidad, parasitándola, es el momento de conectar con la Fuente y liberarnos de las cadenas.
Amar al Ser Cósmico es una de las maneras más potentes para elevar la vibración individual y colectiva, amar al Ser Cósmico es acordarnos de él/ella/ello que somos nosotros en esencia, recordar a menudo que existe una Consciencia Universal que vive dentro nuestro y es el origen de nuestra consciencia, hablar con ella, explicarle nuestros problemas, nuestras ilusiones, darle gracias durante el día, repetir alguno de sus nombres, entregarle todos nuestros actos, pensamientos, emociones, entregarle nuestros problemas, nuestras decisiones, cantar mantras, amar al Silencio, disfrutar de la naturaleza saludando a la Mama Tierra cuando entramos en el bosque.
Abrazar árboles, personas, animales, el motor del Universo es el Amor, recuperar la costumbre ascentral de hablar con cariño al Gran Espíritu.
Los templarios residían por todo el Camino de Santiago para proteger a los peregrinos, hay un Camino secreto, oculto, esotérico, lleno de simbología intuitiva que solo pueden entender aquellos cuya consciencia está suficientemente purificada, tenemos la suerte de poder grabar el Camino sin peregrinos, en soledad, pudiendo entonces explicar todo lo que a uno le sale de dentro, el Camino en realidad termina en Finisterre, el Fin de la Tierra, donde el místico se estira en una piedra con forma de tumba para morir y luego renacer a la Consciencia Divina, el Segundo Nacimiento del que habla Jesús en el Evangelio de Juan, Más allá de Finisterre está el Paraíso de los Celtas, en el Océano Atlántico, ese Océano del que vinieron los supervivientes de la Atlántida y se asentaron en Galicia y otras costas de este mismo Océano.
Recorremos un bosque de carballos (robles) rodeando al sagrado río Miño explicando una pequeña parte de la historia esotérica y mágica de esta tierra llena de enclaves con fuerzas cosmo-telúricas.